Autoevaluación de la Unidad 2

A partir de 1983, con la Ley de Promoción Industrial, se fomentó una fuerte demanda de mano de obra, lo que trajo población de muchas partes de la Argentina. Como consecuencia, se abrieron nuevos puestos de trabajo propios del crecimiento poblacional: la construcción de barrios, el crecimiento del sector comercio y servicios, el desarrollo de la actividad turística a través de la ampliación de la red de vías de comunicación, mayor cantidad de escuelas y centro de salud, etc.

El 70% de la población provincial reside en los dos aglomerados urbanos de la ciudad de San Luis y de Villa Mercedes. Merlo es la tercera ciudad en cantidad de población de la provincia y forma parte del 30% restante de población que se distribuye entre todas las ciudades y pueblos del interior provincial. 

La población urbana de San Luis es del 87% y coincide con el índice nacional que es del mismo valor. Eso permite explicar la tendencia a la urbanización que presenta la provincia en coincidencia con la tendencia en la Argentina y en gran parte de Latinoamérica.

Dado el clima de la Provincia, no hubiese sido posible el desarrollo de la agricultura sin el aporte de riego a través de diques y acueductos. La agricultura de secano, es decir, aquella que no dispone de riego artificial, se practica a orillas de ríos y arroyos, y sus resultados dependen de las variaciones climáticas.

Los departamentos con mayor plantel de ganado vacuno son General Pedernera y Gobernador Dupuy, concentrando más del 60% del total provincial.

El cultivo de frutas y hortalizas se realiza en casi todo el territorio provincial, donde adquiere variantes según las características naturales de cada zona. 

Hasta mediados del siglo XX, la producción era fundamentalmente orientada hacia metales metalífertos (tungsteno y oro). El escenario generalmente ha sido y es la sierra, con la búsqueda del oro en la época colonial, después la sal y las calizas, y el wólfram y la chelita durante las guerras mundiales. 

Entre otras actividades económicas, ya sean vinculadas a la industria o a los bienes primarios, el corredor también facilita el desarrollo turístico al permitir la llegada de visitantes desde cualquier punto del país o de países vecinos. 

También generó un desequilibrio regional al fomentar las migraciones internas hacia las ciudades más grandes y despoblar las ciudades y pueblos del interior.