Actividad 3

LO QUE VENDRÁ (fragmento)

Existe una hipótesis, bastante poética por cierto, que asegura que el planeta es un ser vivo y que los hombres son sus parásitos. Según esta hipótesis, mientras los humanos no se conviertan en una molestia podrán habitarla tranquilamente. Pero si comienzan a traer problemas, la Tierra, como cualquier ser que se siente enfermo, recurrirá a un tratamiento para volver a estar sana.

Como primera consecuencia del tratamiento que la Tierra está aplicando para acabar con lo que le hace daño, se produjo un importante cambio climático: dos palabras con las que se explica que la naturaleza se cansó y no está dispuesta a dejar que la sigan contaminando. Porque a lo largo de la historia el hombre fue  construyendo su imperio, y se podría asegurar que desde hace más de un siglo viene atentando seriamente contra la salud de su anfitriona.

Otro de los motivos del alarmante cambio climático es el ya famoso agujero en la capa de ozono: al estar herida no puede filtrar correctamente las radiaciones ultravioletas. Y lo peor es que el daño es cada vez más grande debido a la presencia de ciertos gases en la atmósfera que favorecen  a su degradación. Esta catástrofe, sumada a la aberrante destrucción de los bosques y selvas, y al aumento de la contaminación del aire y del agua, colabora a provocar que los diferentes climas del globo se tornen cada vez más hostiles y rigurosos.

La destrucción de ambientes naturales por parte de industrias no controladas por los estados ya está produciendo consecuencias directas sobre los seres humanos. En el grupo e las más graves, figura el incremento desproporcionado de enfermedades que sufre la población: ataques de asma y alergias son moneda corriente debido a la cantidad de impurezas del aire.

Saleri, Emiliano. En La maga, 30 de octubre de 2000